Si estás pensando en hacer el Camino de Santiago en bicicleta y no sabes por dónde empezar, sigue leyendo porque tenemos para ti 5 TIPS PRE Camino de Santiago en bicicleta para comenzar a prepararlo.
El Camino de Santiago tal vez sea una de esas cosas que hay que tachar por haberla completado, al menos, una vez en la vida, así que cuando la idea de sumergirnos en aquella aventura en bicicleta comenzó a transformarse en algo REAL, empezaron a surgirnos muchas dudas. Demasiadas.
Jesús y yo conquistamos Santiago de Compostela el 13 de octubre de 2.017. Por motivos puramente logísticos con nuestros trabajos, tuvimos que realizarlo en dos tramos. El primero fue Jaca-León y el segundo, León-Santiago de Compostela.
Finalmente, completamos el Camino Francés, acumulando un total de 890 kilómetros en nuestras piernas.
Tampoco han pasado tantos años, pero tal vez hoy en día, muchos de vosotros ya habéis oído hablar del bikepacking o incluso bastantes lo practiquéis, pero en cierto modo, lanzarte a recorrer un montón de kilómetros con tu bicicleta, un par de alforjas y un saco de dormir por primera vez, da un poco de respeto. Ah! Y con la esperanza que unas simples flechas amarillas y un libro, te hagan llegar cada día al destino marcado. ¡De locos!
¿Cómo no vas a llevarlo bien organizado?
Una vez completada la aventura y tras recorrer ese camino que sin duda te pone a prueba de principio a fin, podemos asegurar que nos preocupamos en organizarlo todo en exceso.
El camino te hace fluir y adaptarte. Cada día es único y para nada, depende de ti. Ese albergue que tenías mirado, puede que cuando llegues a destino esté lleno y has de buscar un plan B sobre la marcha; de repente tus frenos, no frenan y no hay un taller en 50 kilómetros a la redonda; o pensaste en apurar unos pocos kilómetros más para llegar al siguiente pueblo y ese menú del peregrino con el que llevabas soñando un buen rato resulta que no va a poder ser porque el único bar de aquel pueblo cerró su cocina hace ya un rato…
Así que, toma nota:
5 TIPS PRE Camino de Santiago:
1.- Hazte con una Guía del Camino.
Aunque el camino está perfectamente señalizado en todo momento, no está de más llevar contigo un pequeño soporte físico al que echar mano en un momento dado.

No sabría decir con total certeza cuál es la mejor guía. Nosotros simplemente fuimos a Fnac y tras mirar varias, nos quedamos con la que veis en la foto. Resultó ser súper completa: albergues, hoteles, restaurantes, mapas… Sinceramente, nos decidimos por ella, por lo fácil y cómoda que nos pareció in situ su uso. Supongo que ya llevarán alguna edición más…
Pero vaya, elegir la guía creo que es algo muy personal y al final os tiene que transmitir «algo». Cada persona valora unas cosas sobre otras, sino no existirían tantas empresas que se dedican a elaborar guías de viajes….
Eso sí, sobretodo que tenga las distancias entre pueblos bien claras y albergues o alternativas hoteleras. Os permitirá tener bien organizada y bajo control vuestra ruta diaria.
2.- ¡Voy en bici, esto son cuatro días!
Según los días con los que cuentes, ahora que ya tienes la guía, podrás más o menos planificarte. Las etapas de un peregrino a pie, suelen ser de una media de 20km y en bici, pues depende.
Plantéate etapas realistas que te permitan disfrutar de ti y de todo lo que rodea al Camino, pero sobretodo, no te obsesiones, ya que una vez en ruta, tus planes pueden cambiar en cuestión de minutos. Los dos primeros días puedes llevarlos calculados al milímetro, pero después, lo de ser imprevisible tendrá su gracia, os lo aseguro.
El ir en bici en ocasiones te priva de disfrutar de según qué cosas, así que recomendamos que no pases de largo. Para, disfruta y prosigue.
Tengo una buena noticia que darte: Tu objetivo no va a moverse de sitio.
3.- Visita la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de tu ciudad (si es que la hay).

Allí, lo primero que has de pedir, es La Credencial. Esa será tu “acreditación” como peregrino durante todo el Camino. Conseguirás la Compostelana al final del viaje, sellando esta credencial en los Albergues o diferentes establecimientos acreditados durante los últimos 200km en bici. En ambos casos, serán necesarios dos sellos por jornada. En su momento nos costó unos 3€.
Y si quieres parecer un peregrino de verdad, también puedes adquirir la mítica concha del peregrino, camisetas, bastones, capas, guías… A tu elección!
Y vuelvo a repetirlo. La cantidad de información que pueden proporcionarte es infinita, ya que suelen atenderte, personas que no han hecho el camino una sola vez. En nuestro caso, aquel adorable señor, lo había completado hasta en diez ocasiones.
Pregunta, pregunta y vuelve a preguntar.
4.- Entrena.
Este apartado me parece básico. Es imprescindible tener una buena forma física y sobretodo utiliza el material con el que salgas habitualmente a rodar. La ropa o el calzado para la bici se estrenan para la cicloturista del pueblo, créeme.
Sal con la bici, aumenta poco a poco la carga de kilómetros y por último, añade la mochila/alforjas. Parece una tontería, pero todas esas cosillas (por supuesto las imprescindibles) al final pesan y día tras día, con cansancio acumulado y con adversidades “X”, creedme que es importante haber entrenado con “la casa a cuestas”.
5.- Planifica el material básico e imprescindible que debes llevarte.

Punto muy importante y en el que una vez finalizada la aventura, me daréis la razón: con la mitad de la mitad, de lo que os llevasteis por si acaso, era suficiente. Como me parece un aspecto más largo que un simple tip, prometo realizar un post especial.
Cuéntanos qué te han parecido nuestros 5 TIPS PRE Camino de Santiago en bicicleta.
¡Menos es más!
